El directivo Pedro Sainz de Baranda ha participado en los “Encuentros con la Experiencia”, una iniciativa de la Oficina de Antiguos Alumnos de la UC3M. A través de esta actividad,
profesionales destacados comparten consejos y experiencias con antiguos alumnos y estudiantes de la universidad. El consejero de Zardoya Otis y socio fundador de la empresa Sainberg Investments nos habla de su experiencia profesional y de cómo ve el futuro de las empresas españolas.
¿Cómo valoras la iniciativa de la UC3M de organizar estos encuentros entre destacados profesionales y antiguos alumnos y estudiantes?
Me encanta compartir unos momentos con estudiantes y antiguos alumnos que arrancan sus carreras profesionales. No es la primera vez que lo hago: de hecho, en mis últimos años en EEUU fui a hacer algo parecido con los estudiantes del MBA de mi alma mater americana, el Instituto Tecnológico de Massachussets (MIT) y en alguna otra universidad.
Algunas de las preguntas y preocupaciones expresadas por los alumnos te hacen reflexionar sobre tu perspectiva de la cultura empresarial, la visión de lo que supone la vida de un ejecutivo, el equilibrio entre la vida profesional, familiar, social… ¡y espero que sean enriquecedoras para las dos partes!
Una de las diferencias que he notado está en que las preocupaciones en España se centran más en encontrar trabajo mientras que en otros lugares una preocupación mayor era encajar en una empresa o en un proyecto, encontrar la actividad adecuada.
Pienso que los estudiantes de la Universidad Carlos III de Madrid deben mantener alta su autoestima. Con el bagaje que se llevan de una institución educativa de prestigio como esta deben aspirar a algo más que encontrar trabajo. Pueden aspirar a encontrar una actividad que les motive y les permita dejar su huella en la sociedad.
¿Qué consejos darías a los jóvenes que quieren emprender en España?
El emprendimiento es una salida profesional muy interesante en el mundo actual. Hay sectores como los servicios, la economía colaborativa o incluso la tecnología en los que se pueden hacer cosas muy interesantes con capital de arranque reducido.
Mi consejo es que, si van a emprender, lo hagan en algo que les apasione. Para tener éxito en un emprendimiento hay que dedicarle muchas horas y esfuerzo y eso solamente se hará bien cuando te gusta lo que haces. Hay que tener coraje para no desinflarse a la primera dificultad, que sin duda las habrá. Eso sí, hay que aprender de ellas.Esto se aplica a jóvenes y no tan jóvenes; yo ya no lo soy tanto y me gusta el nuevo cariz, más emprendedor, que está tomando mi vida profesional.
Y siempre que puedan deberían de buscar mentores externos que les puedan orientar sobre el sector en el que quieren entrar, complementar sus competencias menos fuertes (marketing, finanzas….). Para eso hay que conocerse a sí mismo y entender que es difícil tener todas las respuestas.
Has sido presidente durante varios años de una multinacional norteamericana, ¿cómo ves las relaciones comerciales entre Estados Unidos y España?
La globalización se ha manifestado en un aumento del comercio (espoleado por tratados de libre comercio), un aumento de la conexión entre las personas, bien a través de viajes físicos, bien a través de medios electrónicos como las videoconferencias, mensajes o correo electrónico, y también como consecuencia un flujo más rápido de información, ideas y buenas prácticas.
En este contexto, para las empresas, la clave está en fomentar la formación y la polivalencia. La formación continua en las empresas es parte de la solución. En Otis, empresa en la que he trabajado 21 años, existe un programa por el cual se permite a todos los empleados matricularse en cursos universitarios, se les paga la matrícula y el material y se les da el tiempo libre necesario para conseguir su título. Este programa ha sido un gran éxito y miles de personas se han graduado con títulos nuevos mientras trabajaban.
Todo esto para enmarcar mi respuesta: si bien hay mucha retórica proteccionista a ambos lados del océano últimamente, pienso que el sentido común prevalecerá y no habrá pasos atrás importantes en el libre comercio global. Por tanto, no creo que EEUU pase a tener una política autárquica. EEUU sigue siendo la primera economía del mundo, es un mercado muy importante para las empresas españolas y no creo que se vaya a cerrar para ellas.
¿Cuáles son los retos de las empresas españolas?
Siempre me vienen a la cabeza tres:
La innovación. Las cosas han cambiado mucho en los últimos años y hay extraordinarios ejemplos de innovación en productos, procesos, logística y marketing en empresas españolas. No me quiero extender en citarlos, pero ahí están. Aun así, todavía la inversión en I+D está por debajo de la media de los países desarrollados y se nota esto también en el número de patentes per cápita. Queda mucho por recorrer y la innovación será fundamental para competir con éxito en un mundo cada vez más globalizado. La colaboración universidad/empresa que está intentando impulsar la Universidad Carlos III de Madrid es uno de los aspectos a potenciar.
La globalización. Pienso que para sostener una ventaja global a largo plazo hay que ir evolucionando hacia una fase en la que el desarrollo de producto se hace de manera coordinada en función de donde están el talento y el mercado, y creo que esto es una asignatura pendiente en muchas empresas españolas. Por otra parte, sí que hay mejores mimbres, tanto el conocimiento de idiomas como las experiencias de estudios o estancias en el extranjero se han multiplicado y eso reduce las barreras que nos encontramos hacia una mejor integración cultural.
La gestión del talento. En España una mayor inversión en formación en la empresa y una mayor flexibilidad en el mercado de trabajo que fomenten la movilidad deberían de mejorar el capital humano y por tanto la productividad y competitividad internacional. Y, como he dicho antes, gestionar los recursos humanos a nivel global fomentando la diversidad puede tener un efecto multiplicador en la creatividad y en la innovación. Pienso que aquí nos queda mucho por hacer a nivel legislativo y a nivel de prácticas de gestión.
¿En qué consideras que deben mejorar nuestras empresas?
Es un orgullo ver la evolución que han tenido las empresas españolas en los últimos años. He visto como se poblaba Nueva Inglaterra de sucursales del Santander o cómo se abrían tiendas de Zara por el mundo; viviendo en Connecticut, le traje a mi hija un regalo de Singapur que compré en una tienda que resultó ser española (Desigual), incluso empresas industriales como Gestamp o Mecalux han abierto plantas por el mundo y se están globalizando muy rápidamente. Si seguimos mejorando al mismo ritmo ¡el futuro será brillante!
Perfil de Pedro Sainz de Baranda
Pedro Sainz de Baranda es ingeniero de Minas por la Universidad de Oviedo, doctor en Ciencia de Materiales por Rutgers University y MBA por el Massachusetts Institute of Technology (MIT). Es Consejero del grupo Zardoya Otis y socio fundador de Sainberg Investments. Ha desarrollado la mayor parte de su carrera profesional en United Technologies Corporation, empezando en el Centro de I+D Corporativo y posteriormente en Otis. Ha liderado el equipo que desarrolló la innovación técnica que ha posibilitado el lanzamiento del ascensor Gen2, en el Centro de Ingeniería de Otis en Connecticut (USA) y ha recibido la “George Mead Medal”, por su contribución al concepto de utilizar cintas planas en el sistema de elevación «GeN2» para sustituir a los tradicionales cables de acero. Figura como inventor en más de 100 patentes internacionales.