Tradicionalmente los medios deportivos, impresos y audiovisuales, alegan falta de espacio físico o de tiempo para hacer más referencia al deporte femenino ¿qué le parece este argumento?
Es la justificación que nos han dado históricamente. Ese argumento, el cual no comparto en absoluto, podría valer hace cien años, pero actualmente, y ya desde hace bastantes años, las mujeres realizan deporte en un porcentaje similar a los hombres y, además, han ganado más medallas que ellos en los dos últimos Juegos Olímpicos de verano, tanto en Londres 2012 como en Río de Janeiro 2016. Pero, a pesar del aumento la práctica deportiva y de sus éxitos deportivos, siguen estando infrarrepresentadas en los medios. La única respuesta ante eso, y basándonos en una gran cantidad de investigaciones y estudios sobre el tema a nivel nacional e internacional, es que el deporte sigue siendo un mundo hecho por, para y sobre hombres. Aunque se quiera ocultar y justificar con falta de espacio y de tiempo.
Este argumento (la falta de espacio) no tiene demasiada justificación en las redes sociales y en la prensa online ¿cuál es el panorama en estos medios?
Pasé más de tres años de mi vida recopilando datos, analizando y leyendo artículos para entender qué es lo que pasa en las redes sociales donde ya no hay esos límites. Como periodista deportiva, veía las informaciones que publicaban los medios deportivos en las redes, sobre todo en Twitter, y realmente me indignaba. Como yo estaba percibiendo otra realidad, decidí investigarlo. De esa situación surge mi tesis doctoral, en la cual analizo el Twitter de cuatro medios deportivos durante seis meses (Marca, Mundo Deportivo, y las cuentas específicas de deporte de ABC y El País). Tras analizar casi 15.000 tweets he podido comprobar que la cobertura del deporte femenino y la aparición de las deportistas es todavía inferior a la que reciben en los medios tradicionales. Por lo que, la respuesta a esa “justificación” que nos han dado históricamente sobre la no cobertura del deporte femenino en los medios por falta de espacio y de tiempo, la desmonto con mi tesis. Tras analizar Twitter, donde, repito, no hay límite de espacio ni de tiempo, he comprobado dos cosas muy importantes: 1) la cobertura sobre las deportistas es incluso inferior a la recibida en los medios tradicionales (siendo de un 1.6% durante el período rutinario) y 2) las deportistas comparten un gran espacio con mujeres no deportistas, como novias, madres, ex parejas de deportistas masculinos, hasta el punto que, durante el período rutinario de cobertura informativa, una mujer tiene tantas posibilidades de aparecer en el Twitter de un medio deportivo por ganar una medalla como por ser la novia de un deportista.
La conferencia que impartió en la universidad lleva por título “Desafío Tokio: la invisibilidad de las deportistas y los medios de comunicación”. ¿A qué hace referencia ese desafío?
Está demostrado que durante los Juegos Olímpicos las deportistas y el deporte femenino recibe más cobertura que durante cualquier otro período de cobertura informativa. De hecho, durante los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro de 2016, evento que analizo en mi investigación, la cobertura sobre el deporte femenino es de un 19%. Aunque es cierto que las deportistas y el deporte femenino recibe más cobertura durante este período extraordinario, la brecha de género sigue siendo muy alta. Se publica una media de 81 tweets por día sobre deporte femenino y 343 tweets sobre deporte masculino. Aunque las deportistas tienen más éxito que sus compañeros deportistas, ganando incluso más medallas, la cobertura está sesgada. Se trata de un desafío patriarcal que consiste en visibilizar el deporte como una norma para los hombres, dejando a las mujeres en un segundo plano.
Esta situación de invisibilidad de las deportistas ¿es generalizada o es un fenómeno nacional?
Por desgracia es algo generalizado. Hay dos estudios en los cuales baso parte de mi investigación. A nivel nacional, está el de la profesora de la UC3M Clara Sainz de Baranda, y a nivel internacional el de Cooky, Messner y Hextum. En ambos estudios se revela que la cobertura que reciben las deportistas es de una media del 5%, reduciéndose a casi la mitad en las informaciones en las que la deportista era la protagonista y no aparecía acompañada por un hombre. Estos datos son muy reveladores porque nos demuestran que el deporte, gracias a los medios deportivos, sigue visibilizando y reforzando los estereotipos de género.
¿Hay estudios o está cuantificado el impacto mediático de los éxitos deportivos femeninos y su relación con el aumento de la práctica del deporte en chicas?
Desconozco el porcentaje real, pero puedo asegurar que influye de una forma muy notable. Tuve la suerte de participar en un programa educativo que promovía la igualdad a través del deporte en colegios y escuelas deportivas y cuando me puse a elaborar las fichas para que los niños y las niñas identificasen a diferentes deportistas (hombres y mujeres), me di cuenta de que solo iban a reconocer a los que salen en los medios. El resto, aunque hayan ganado muchas cosas, serán auténticos desconocidos, más bien, desconocidas, para todo el alumnado.
Lo que no aparece en los medios no existe, esa es la realidad, por eso es tan importante la concienciación y visibilización en los medios. Deben, y debemos, ser conscientes del papel que jugamos a la hora de romper con los estereotipos de género y con ofrecer una visión sesgada del deporte. Hay que tener cuidado con cómo se escriben los titulares, qué información se destaca cuando hablas de una deportista, y, muy importante también, las imágenes que se publican sobre ellas. Debemos contribuir a crear un mundo más igualitario.
Aparte de la cuestión cuantitativa, ¿cómo es la visión que los medios y las redes sociales dan de las mujeres deportistas? ¿tiene el mismo rigor que la de los hombres o existen estereotipos relacionados con el género?
El problema no es que las deportistas aparezcan en un porcentaje inferior en las informaciones deportivas, sino que tanto el contenido como las imágenes que se publican están estereotipadas. Esto lo que hace es reforzar la idea de que el deporte es un mundo masculinizado dominado por los hombres, y como mujeres ocupamos un plano secundario. Las deportistas, por ejemplo, no aparecen despeinadas en las fotografías y aparecen en la mayoría de las fotos de forma pasiva, es decir, sin practicar deporte, mientras ellos aparecen de forma activa y de una forma más profesional. Esto acaba influyendo en el ideal que tiene la sociedad sobre el deporte. Y quiero resaltar que, aunque es cierto que se ha mejorado en la cobertura que se realiza de las deportistas, que ya no aparecen sexualizadas de una forma clara, permanece un sexismo más sutil, que es más difícil de detectar.
Alba Adá Lameiras es licenciada en Periodismo por la Universidad Pontificia de Salamanca. Experta en Deporte, Género, Comunicación Online y Marketing. En 2013 fundó ‘Goal Comunicación’, empresa especializada en comunicación 2.0, redes sociales y marketing online, y desde hace varios años comenta semanalmente la actualidad del Fútbol Sala Femenino en el programa on line de COPE ‘FutsalCope’. Ha sido formadora en entidades como la Cámara de Comercio, la CEO (Confederación Empresarial), la UNED (Universidad a distancia de España y Latinoamérica), Universidad Pontifica de Salamanca, Universidad de Vigo, Grupo ADAMS, entre otros. Su tesis doctoral versa sobre “Mujer, Deporte y Redes Sociales”.